Capítulo 101
Diego, como si no notara su distanciamiento le preguntó: —He oído que el director Xavier mencionó que eres de Solarena. Tu hermano vino desde tan lejos solo para verte, de veras sí que se preocupa mucho por ti. ¿Cómo fue que te permitió venir aquí a enseñar?
Rocío hizo mala cara, no quería responder a eso. Tomó un libro de texto de la mesa y, buscando una excusa le dijo: —Diego, la clase va a comenzar, debo irme ahora.
Después de decir esto, sin darle a Diego la oportunidad de responder, tomó los libros y salió a toda prisa de la oficina.
Diego observó su espalda con una expresión sombría, y un rastro de desagrado cruzó sus ojos.
Rocío, ya lejos, no lo notó.
...
Doña Isabel se mudó a la casa de los López, y Luis, no queriendo encontrarse con ella por la mañana, fue temprano a la compañía.
Tan pronto como la secretaria llegó al trabajo, inmediatamente le pidió que llamara a Francisco.
Al recibir la notificación, Francisco rápidamente envió un mensaje a Tomás, pero no recibió respuesta d

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