Capítulo 53

Anita se apresuró a consolarme: —Sare, no te sientas mal. La relación de sangre es algo maravilloso, solo tienes que divorciarte de Víctor, recuperar tu dinero y, a su tiempo, encontrar al Señor Fernando y a la Señora Andrea, y a Javier. Estoy segura de que te perdonarán si admites tus errores. Un rayo de esperanza surgió en mi corazón: —¿Realmente funcionará? Anita respondió: —¡Por supuesto que sí! Eres la hija de la familia García. Tus padres ya son mayores, y Javier solo tiene una hermana. Ellos seguro que estaban decepcionados antes. Solo necesitas arrepentirte y ellos te perdonarán. Las palabras de Anita me llenaron de confianza. Sí, mis padres y Javier me mimaron y amaron tanto cuando era pequeña. Ellos no podrían realmente abandonarme. Solo necesito aclarar las cosas con Víctor, y seguramente me perdonarán. Incluso si no me perdonan, al menos no cortarán los lazos conmigo. Los lazos familiares pueden repararse lentamente, pero este matrimonio debe terminarse de inmediato. Hablé