Capítulo 13
Manuel ya se ha bajado del coche. Él está parado afuera, sonriendo: —Sare, hemos llegado.
Tras bajarme del coche, quedé paralizada.
El lugar es remoto, pero el paisaje, impresionante.
Miro alrededor, estamos en la ladera de una montaña. Delante se extiende la interminable línea costera azul, el sol poniente esparce un esplendoroso atardecer sobre el nivel del mar, detrás, un bosque exuberante.
Una casa muy antigua se alza entre los árboles.
En teoría, una casa tan aislada debería ser sombría, pero la que tengo frente a mí claramente no lo es.
La valla de la casa está cubierta de un montón de rosas preciosas, rojas, rosadas, amarillas; tantas, que parecen un mar de flores en ebullición.
Me emociono: —¡James Gowie! ¡Claire Austin! ¡Balcón de jugo! ... Y además, ¡Gertrude Jekyll rose! Dios mío...
Giro alrededor de la pared floral.
Los nombres de las rosas saltan uno tras otro en mi mente.
Manuel, con una mano en el bolsillo, se apoya en el coche y me observa con una sonrisa.
El viento sop
Haga clic para copiar el enlace
Descarga la aplicación Webfic para desbloquear contenido aún más emocionante
Encienda la cámara del teléfono para escanear directamente, o copie el enlace y ábralo en su navegador móvil
Encienda la cámara del teléfono para escanear directamente, o copie el enlace y ábralo en su navegador móvil