Capítulo 59

Cuando Bruno escuchó la voz de Sofía, su corazón dio un vuelco. Sus ojos, que antes estaban apagados, de repente adquirieron un brillo. ¿Por qué sentía que Sofía lo estaba llamando a él? Rápidamente se acercó, se agachó junto a ella, y con voz temblorosa de emoción, le tomó la carita: —Sofía, ¿a quién estás llamando? Alicia, al ver la situación, se sintió un poco perdida. Quiso tomar a Sofía y decirle que había cometido un error, que no era él. Pero sabía que Bruno ya sospechaba de la paternidad de Sofía. Cuanto más nerviosa se pusiera, más levantaría sus sospechas. Mantuvo la calma y, con una mirada tranquila, sonrió suavemente hacia Sofía. Sofía, al notar la incomodidad en el ambiente, miró a su mamá y, como si algo no estuviera bien, giró rápidamente hacia Víctor, abrazándolo y diciendo con voz clara: —Papá. Víctor, emocionado, la besó en la mejilla: —Qué buena hija, papá te quiere mucho. Ver ese gesto de cariño hizo que el pecho de Bruno se llenara de amargura.