Capítulo 109
No me moví, Adrián se paró en el helicóptero y me llamó: —Vamos, sube.
Sostenía el caramelo en mi mano mientras lo observaba, y entonces él añadió: —Además, necesitas ver los ajustes que hemos hecho.
Eso fue similar a lo que dijo antes de pedirme que subiera, pero, ¿qué estaba viendo entonces?
—Adrián, estamos en horario laboral, no deberías mezclar asuntos personales con el trabajo, ni engañarme —le advertí.
—Oh —respondió obediente, pero aún así permaneció allí, esperando por mí.
No tuve más opción que levantarme y caminar hacia él. Justo cuando iba a subir al helicóptero, intentó tomarme de la mano, pero me esquivé.
Justo cuando puse un pie en el helicóptero, este se sacudió repentinamente y, por instinto, extendí la mano y agarré su brazo.
El momento incómodo me hizo sonrojar, pero él miró alrededor y murmuró: —Necesitamos que alguien revise este helicóptero, ¿cómo es que se sacude?
Me quedé sin palabras.
Adrián no me había engañado esta vez. Una vez arriba, comenzó a hacer los aju
Haga clic para copiar el enlace
Descarga la aplicación Webfic para desbloquear contenido aún más emocionante
Encienda la cámara del teléfono para escanear directamente, o copie el enlace y ábralo en su navegador móvil
Encienda la cámara del teléfono para escanear directamente, o copie el enlace y ábralo en su navegador móvil