Capítulo 61

Alejandro se retira del lugar. Tampoco se imaginaba que una frase escrita al azar pudiera causar tal conmoción. Provocó una competencia feroz entre los empresarios, quienes llegaron a ofrecer hasta 15 millones de dólares. ¡Era una locura! Él pensaba que su caligrafía no valía más de 15 mil dólares. Realmente no entendía qué pasaba por la mente de esos empresarios. A Alejandro no le gustaban ese tipo de situaciones, así que se fue sin más. Mientras tanto, la subasta continuaba. La empresaria en cuestión era la gerente general de una conocida firma de capital de riesgo en Ciudad A, apodada la Reina de la Inversión, con 15 mil millones de dólares bajo su control. Ella ofreció 15 millones de dólares, silenciando a todos los demás empresarios. Sin embargo, Carmen puso fin a esta escena absurda con una sola frase: —¡Ni por 15 millones de dólares se vende! ...... María no sabía cómo había salido del lugar; su mente estaba un poco nublada. Ella acababa de decir que Alejandro era un desecho sin