Capítulo 138
Hasta ese momento, él aún creía que ella estaba causando problemas para apartar a Laura. Ana, incapaz de contenerse, soltó una risa irónica mientras tomaba el acuerdo de divorcio que había dejado de lado y se lo extendía a Luis.
—Ya preparé el acuerdo de divorcio; échale un vistazo y, si no hay problemas, firma. Ya no deseo continuar a tu lado.
Luis arrebató el documento, lo ojeó rápidamente y, al notar que Ana ya había firmado, se llenó de ira.
Rasgó el documento en pedazos y los lanzó al cesto de basura. Con el rostro marcado por la furia, parecía intentar ocultar la alarma que surgía en su interior.
—Veo que te has preparado bien, incluso trajiste abogados, pero ¿crees que voy a creer esto?
—Parece que has tenido días demasiado tranquilos y buscas complicaciones. Te he dado suficiente dignidad, ¿qué más quieres? ¿No estarás contenta hasta que las cosas se salgan de control?
—No olvides que el Grupo Eterno aún necesita inyecciones de capital del Grupo López. Si te atreves a usar el d

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