En Ciudad del Río, todo el mundo sabe que María García, la señora Fernández, es solo una figura decorativa. A pesar de haberle dado un hijo a Alejandro Fernández, no logró calentar el corazón de ese hombre. El mismo día que recibió el certificado de divorcio, María publicó una foto del documento en Instagram con el pie de foto: ¡Feliz soltería! Justo cuando todos esperaban que Alejandro se casara con su eterno amor Leticia González, un paparazzi lo captó yendo a un bar a altas horas de la noche para recoger a alguien. La mujer que tenía en sus brazos se parecía mucho a María. Una noche, un paparazzi fotografió al gran jefe Fernández arrodillado frente a la puerta de un edificio residencial, con durianes a sus pies y un cartel que decía: ¡Dispuesto a ser el sustituto una vez más!