Capítulo 6

Al escuchar de repente la voz de Howard, Sharon se quedó pasmada. La escena de su boda de ese día comenzó a aparecer en su mente. La crueldad de Howard y su falta de confianza sobre ella habían hecho que Sharon se sintiera bastante decepcionada. Howard colocó una carpeta de documentos en el escritorio de la oficina. Al agachar la cabeza, él vio a la mujer que estaba sentada en la silla. Su expresión cambió y sus ojos se agrandaron. "¡¿Eres... Sharon?!". Su aparición lo tomó por sorpresa. '¿Ella regresó?'. Sharon no dejó escapar ninguna emoción nerviosa. En cambio, fue Simon, que estaba sentado en la silla ejecutiva, quien miró a ambos con una mirada intrigante. "¿Qué pasa? ¿Se conocen?". "¡Para nada!". Sharon contestó directamente sin pensarlo ni un segundo más. Howard permaneció en silencio por un momento antes de soltar una burla fría. "Así es, no nos conocemos. La Sharon que antes conocí había muerto hace mucho tiempo". Sharon finalmente levantó la mirada y lo miró. Ambos intercambiaron miradas y la atmósfera se tensó. Al final, Sharon logró recuperarse. Era su primer día trabajando en la compañía. Nada bueno saldría de eso si ella tuviera una gran pelea con Howard. Ella se frunció los labios y se giró. Hizo que pareciera que ella no lo conocía en absoluto. "¿Quién es ella, tío?". Howard continuó mirándola. '¿Por qué ella está aquí?'. Simon desde el principio estaba prestando atención a las reacciones de ambos. Sin embargo, actuó como si no supiera nada y dijo casualmente: "Ella es la diseñadora recién contratada por nuestra compañía". '¿Diseñadora? ¿Tiene tal talento ahora?', 'Han pasado cinco años desde la última vez que nos vimos, pero ella sigue siendo la misma como antes'. Howard había pensado que Sharon estaría viviendo una vida miserable. Nunca esperó que ella viviera su vida mejor que antes. Ella era incluso más encantadora ahora también. Howard se apretó los puños en secreto. "Puedes irte si no hay nada más". Simon se hizo cargo de los documentos que Howard había venido a entregar. Howard retiró su mirada. Su expresión tensa hizo evidente que se estaba reprimiendo para no hacer algo. Sin embargo, no dijo nada más y simplemente asintió hacia Simon antes de dar grandes pasos para abandonar el lugar. Al escuchar que los pasos de Howard estaban ahora más lejos, la ansiedad de Sharon finalmente se calmó. Ella no esperaba que su nuevo jefe fuera el tío de Howard. 'Es solo que... Simon parece que solo tiene 30 años como máximo. A decir la verdad, en su corazón ella todavía se sentía agitada. Sin embargo, intentando con una expresión tranquila, dijo: "Presidente, ¿puedo volver al trabajo?". Los ojos de Simon se fijaban en ella como si quisiera decir algo más, pero al final sólo dijo, "Puedes irte". Él pudo ver una pizca de relajación en sus ojos. Parecía que la investigación de Franky era verdad. Ella era la ex novia de su sobrino. Sharon salió de la oficina del presidente y caminó distraída hacia el ascensor. Sin embargo, en una esquina, una mano de repente apareció y la tiró hacia un lado. "Ah...", ella gritó nerviosa. Esa persona inmediatamente le tapó la boca y la arrastró a la fuerza a un lugar sin nadie antes de soltarla. "¿Howard? ¿Qué demonio estás haciendo?". Ella luchó por liberarse. Al enterarse de la identidad de la persona que la había llevado, ella se exasperó. Howard se acercó un poco más a ella. "Soy yo el que debe preguntar eso. ¿Por qué todavía tienes las agallas de regresar? ¿Qué estás tramando al ingresar a la Corporación Central?". Sharon no retrocedió. Ella levantó la cabeza para mirarlo. "¿No lo oíste tú hace un momento? Ahora soy la diseñadora de Corporación Central. Por lo tanto, estoy aquí para trabajar. ¿Si no, para qué estoy aquí?". "¿Trabajar? ¿Me estás tomando el pelo?... ¡Creo que tienes otro motivo!". Él sostuvo su barbilla mientras se acercaba poco a poco a ella. "¿Estás aquí para seducir a mi tío?". Los ojos de Sharon se volvieron sorprendidos cuando le apartaba la mano y levantaba la suya para abofetearlo. "¡Howard! ¡Será mejor que no digas tonterías, o de lo contrario, te acusaré de difamación!". Howard estaba loco de rabia ahora porque Sharon logró abofetearlo. "¿No eres una mujer mentirosa? ¿Por qué sigues actuando de manera inocente hasta el día de hoy?”. "Howard, puedes elegir no creerme, ¡pero no puedes humillarme! Solo necesitaste una palabra de Sally para poner toda tu confianza en ella. ¿Por qué no puedes confiar en mí?". Ella sabía que Howard le estaba reprochando por la foto de ese día. "Además, ¿crees que esas imágenes son reales? ¿Alguna vez has pensado por qué esas imágenes se exhibieron en el día de nuestra boda?". La expresión de Howard era terrible mientras la miraba. Estaba vacilando, pero todavía se negaba a creerla. "¿Te atreves a jurar que nunca me engañaste?". Sharon se rindió mientras lo miraba con calma. "Lo crees o no, ya no hay nada más entre nosotros", ella dijo antes de pasar por él rápidamente para abandonar el sitio. Ella luego por fin conocía la razón por la que Howard tenía un tío tan joven. Eso era porque el Director Zachary lo tuvo cuando estaba a una edad muy avanzada. Tenía casi 50 años cuando nació su hijo menor, Simon Zachary. Si ella se hubiera enterado antes de eso, no habría venido a la Corporación Central a trabajar.