Capítulo 73

—¡¿Cómo que simplemente amas a alguien?! Si amaras a una persona, no diría nada, ¡pero amas a un perro! —Te doy un consejo, las personas y los perros no son compatibles. Si realmente lo amas, transfórmate en perro, ¡porque entre especies diferentes no puede haber matrimonio! Las palabras desvergonzadas de Leticia la sacaron de quicio. El aura de María García se encendió por completo, sin cansarse de devolver los insultos, sin dejar ningún rastro de dignidad para los dos sinvergüenzas. Pero... Sabía las consecuencias. Con solo ver la mirada furiosa de Alejandro, lo entendió. —¡María García, espera y verás! Un hombre sabio no lucha contra una situación desfavorable. A María no le importó la expresión de Alejandro, se dio la vuelta y salió corriendo. Después de salir de la habitación VIP, y asegurarse de que Alejandro no la seguía, por fin se relajó. ¡Qué bien se sintió soltar todo eso! ¡Ese par de traidores merecían ser encerrados para no molestar a nadie más! Después de desahogarse, Mar