Capítulo 91

Lucille deslizó su tarjeta y entró en la habitación. Lo primero que hizo fue cerrar la puerta. ¿Quién hubiera pensado que se encontraría con José mientras intentaba evitar a Samuel? Se frotó las sienes. Sintiendo que le iba a doler la cabeza, fue al baño a quitarse el maquillaje, tomar una ducha y cambiarse de ropa. La niebla en el baño era densa. Una capa de vapor de agua cubrió el espejo del baño. Lucille se quitó la peluca y se enjuagó la cara. Sus delicados rasgos se reflejaban en el espejo. Su piel era tan blanca como la nieve, y su piel era suave como la crema. Lucille se vistió y salió. Antes de quedarse dormida, recibió una notificación de que la comisión de 100 millones se transfirió a su cuenta. Finalmente tenía algo de dinero. Las comisuras de sus labios se curvaron. La subasta en Mount Ocean House estaba ocurriendo ese fin de semana. Cuando llegó el momento, tuvo que comprar el CD de su madre. Nunca le daría a nadie la oportunidad de empañar y humillar a Annabelle. Lucille