Capítulo 142

Stella vio que su hijo le hablaba a Tristan de una manera muy descortés. Por esa razón, ¡ella sintió que era necesario intervenir! ¡De lo contrario, en el futuro el chiquillo lo trataría como si fuera de los suyos! "¡Adrian, si tienes hambre, te prepararé algo en casa! Vámonos ya!", dijo ella. "¡No, no quiero!", se negó inmediatamente el pequeño. Luego dijo: "Cariño, cuando no me viniste a buscar, ¡ya lo había hablado con el tío Tristan! Él me va a llevar a comer comida francesa. ¡También me ha dicho que hay un montón de platillos deliciosos en ese restaurante! ¡Son mis favoritos!" Stella se quedó sin habla. ¿Acaso la comida francesa era la preferida del niño y la que ella cocinaba habitualmente no lo era? En ese caso, ¿por qué cada vez que ella cocinaba, él comía tanto? Se devoraba todo lo que preparaba. Ella estaba furiosa, pero no podía perder los estribos y dijo suavemente: "Adrian, ¿por qué quieres ir a cenar con el tío Tristan en vez de conmigo? Me pondré triste si me abandonas".