Capítulo 378
Colgando el teléfono, Héctor se giró y corrió.
Camila: —¡Héctor, adónde vas, espera por mí!
Camila intentó seguir a Héctor.
Pero Alarico la agarró de un tirón, —¿Para qué la sigues? No tienes permiso para ir.
Camila se lo sacudió de encima, —¡No te metas!
Camila rápidamente siguió a Héctor.
Alarico apretó los puños llenos de rabia.
...
Camila siguió a Héctor hasta un pequeño hospital, Juliana yacía en una cama blanca, aún sin recuperar la conciencia.
Fernanda, a su lado, no paraba de llorar, tan asustada que estaba pálida, mientras una vecina consolaba a Fernanda.
Héctor se acercó de inmediato, —¡Fernanda!
—¡Héctor!— Fernanda, con su cuerpo delgado, se lanzó a los brazos de Héctor, llorando desconsolada, —Héctor, por favor, revisa a mamá, no despierta, por más que la llamo.
Héctor intentó consolar a Fernanda y luego miró hacia la cama donde yacía Juliana, —¡Mamá!
Juliana no respondió.
La vecina dijo, —Héctor, deberían llevarla rápido a un hospital grande para tratarla. El médico que vi

Locked chapters
Download the Webfic App to unlock even more exciting content
Turn on the phone camera to scan directly, or copy the link and open it in your mobile browser
Click to copy link