Capítulo 95

—Raqui, ¿ya saliste del trabajo? —Acabo de salir, ¿qué pasa, hermana? —He preparado algunos platos; tu cuñado tiene una reunión esta noche y no volverá a casa. ¿Vienes a cenar? —La voz de Nuria sonaba extraña, apagada. Raquel, quien había crecido bajo el cuidado de su hermana, de inmediato notó algo raro en su voz y bajó la mirada hacia la fruta en sus manos. —Está bien, voy para allá enseguida. Nuria vivía en Residencial Vista Verde, una zona residencial de clase media con un ambiente agradable y servicios adecuados. Uno de los motivos por los que Nuria había podido casarse con Ángel era precisamente esta casa. En aquel entonces, Raquel pensaba que su cuñado era un hombre responsable que, sin duda, proporcionaría un hogar cálido y armonioso a su hermana. Pero ahora, parecía que ambas se habían equivocado. Ganar dinero es una cosa, pero cuidar de su familia es otra. El cambio de actitud de Ángel antes y después del matrimonio era el mejor ejemplo. Raquel bajó del coche ce