Whitty dudó por un momento en si irse o no después de escuchar el consejo de Bebé Robbie. Tal vez la razón por la que no se había ido era que aún no era capaz de dejar de lado esta relación. Todavía tenía expectativas hacia Jens.
Bebé Robbie le quitó el equipaje enseguida. Le dijo descaradamente: “Cuñada, date prisa y ven conmigo a casa. Mi madre ha preparado personalmente un banquete para darte la bienvenida. Si vuelves tarde, la comida se enfriará”.
Los ojos de Whitty se enrojecieron al escuchar que Angeline había cocinado personalmente para ella. Se agarró al brazo de Bebé Robbie y le dijo: “¿De verdad Mami cocinó para mí?”.
Bebé Robbie asintió y dijo: “Sería un tonto si te engañara”.
Después de escuchar lo que dijo, los ojos de Whitty se pusieron rojos. Arrastró su equipaje y regresó con él.
Bebé Robbie sonrió mientras miraba la silueta de Whitty.
“Resulta que la que realmente es capaz de convencerte de que vuelvas es Mami”.
Whitty y Bebé Robbie volvieron al Chalet de Turmal