Capítulo 73

Antonio enderezó la botella de vino que yacía sobre la mesa y propuso: —¿Qué tal si vas a bailar al escenario de abajo? Amelia se paró un momento al escuchar la sugerencia. Siempre había dado la impresión de ser una joven tranquila y seria, dedicada a sus estudios y a las buenas costumbres. Se encontraban en el bar más concurrido y elegante de Miraflores. El salón estaba repleto de gente, lo que hacía que la idea de Amelia bailando allí realmente fuese un gran desafío. Los demás en el reservado comenzaron a silbar emocionados, y la atmósfera se calentó de inmediato. Ximena rió. Ella y Amelia habían crecido juntas, ¿quién mejor que ella para conocerla? ¿Cómo podría bailar esta persona tan inferior? ¡Ah... Ir allí solo resultaría en hacer el ridículo! La sugerencia de Antonio no podría haberle gustado más. Mientras tanto, Orlando también exteriorizó su duda, considerando lo conservadora que era Amelia, seguro que sería un desastre. Ximena miró a los demás con una expresión preocupada: —E