Capítulo 305
"No. Puedo trabajar en el estudio".
Al ver lo persistente que era Neil, Silvia dejó de persuadirlo. Asintió y volvió a su habitación.
No tardó en quedarse dormida en la cama. Mientras dormía, Neil pareció entrar en la habitación y se quedó un rato.
Era casi de noche cuando se había despertado.
Se incorporó lentamente y, tras encender la lámpara, vio un vaso de leche caliente en la mesilla de noche.
Se levantó de la cama para lavarse porque quería sentarse un rato en el salón.
Nada más abrir la puerta de su habitación, sintió el maravilloso aroma de la comida.
Cuando llegó a la entrada de la cocina, vio a Neil de pie delante de los fogones con un delantal. Se quedó perpleja.
Neil se volvió y la vio allí de pie, sorprendida, así que le dijo: "Anda, vete a ver la tele. La cena estará lista pronto".
"De acuerdo".
Más de diez minutos después, Neil sirvió un poco de sopa en la mesa y llamó a Silvia. "Es hora de cenar".
Se levantó y se dirigió a la mesa. La deliciosa comida l
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