Capítulo 251
Silvia haría que Sigwald regresara todos los fondos malversados con intereses.
“¡Me rehúso a firmar este documento!”.
“En ese caso, serás suspendido temporalmente. No tendrás permitido regresar hasta que aceptes y estés dispuesto a compensar las pérdidas de las compañías”.
Sigwald, furioso, apretó los dientes y dijo: “¡Silvia Pond, no te pases de la raya! ¡¿Acaso crees que te tengo miedo?!”.
Silvia sonrió. “Ya sé que no me temes. Si te molesta mi forma de hacer las cosas, siempre tenemos la opción de resolver las cosas en la corte”.
Sigwald se quedó callado después de escuchar estas palabras de Silvia.
Un momento después, él dijo con enojo: “¡Solo espera, Silvia Pond!”.
Él salió furioso de la habitación y cerró la puerta de golpe.
La expresión de Silvia no cambió mientras recogía sus documentos y seguía leyéndolos.
Cuando ya casi era la hora de la salida, Silvia recibió una llamada de Neil.
“Necesitamos regresar esta noche al Patio de la Armonía. Mi abuela se enteró de nuestr
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