Capítulo 51

Justo después de hablar, vimos entrar a una enfurecida Lucía. Cuando ella vio a Diego, su enfado se intensificó y se acercó para abofetearlo, diciendo: —Si tu madre golpea a Carlos Almagro, yo te golpearé a ti. Diego, quien apenas había logrado contener las lágrimas, rompió a llorar una vez más. Lucía, ignorándolo, se dirigió directamente a la cocina. Al ver que la comida en la olla aún estaba caliente, se tranquilizó y volvió al salón. Lucía recogió todas las cajas de comida que Diego había dejado y se las entregó a Carlos, diciendo: —Tíralas. Carlos, obediente, tomó las cajas y corrió hacia afuera. Diego observaba la escena, sin entender el motivo detrás de sus acciones. Lucía le lanzó una mirada. ¿Acaso no le gusta acusar frente a Sergio? ¿No es Sergio quien adora a este hijo? ¡Hmpf! Está decidida a destruir la relación entre padre e hijo día tras día... Hasta que llegue el día en que, aunque Diego diga la verdad, Sergio no le creerá. Al ver que Carlos regresaba, Lucía le hizo una s