Capítulo 93 Fin
Silvia comprendió que él pensaba que ella había hecho algo con Eduardo y quería revisarle el cuerpo.
¡Silvia se sentía tan agraviada que quería explotar!
¿Era ella su propiedad personal? Nadie podía tocarla, y si alguien sospechosamente lo hacía, él tenía que inspeccionarla.
¡Él no la consideraba una persona!
¡Estaba harta de él!
Silvia no sabía de dónde sacó las fuerzas, pero de un empujón lo apartó, se ajustó el camisón y se bajó de la cama dispuesta a irse.
Ángel la alcanzó por detrás y le agarró la mano.
Sin pensarlo, Silvia se dio la vuelta y lanzó una bofetada.
Pero no acertó.
La otra mano también fue atrapada por la gran mano del hombre. Ángel avanzó rápidamente dos pasos y la empujó contra la pared, sujetando sus manos detrás de su espalda.
Silvia no quería rendirse e intentó darle una patada, pero Ángel la inmovilizó completamente.
—¿Te estás volviendo valiente? ¿Te atreves a ponerme las manos encima? —Ángel la miraba con una expresión glacial.
Silvia, con el pecho agita
Haga clic para copiar el enlace
Descarga la aplicación Webfic para desbloquear contenido aún más emocionante
Encienda la cámara del teléfono para escanear directamente, o copie el enlace y ábralo en su navegador móvil
Encienda la cámara del teléfono para escanear directamente, o copie el enlace y ábralo en su navegador móvil