Capítulo 35

Esperaba que Joseph le diera buenas noticias cuando volvieran a hablar en la semana. Mientras pensaba en ese asunto, sonó su teléfono. Al mirar la pantalla, se dio cuenta de que era una llamada de la estación de policía. Levantó una ceja y contestó la llamada. "Hola". "Señorita Jules, según la información y las pruebas que nos ha proporcionado Sebastian Zanes, es usted sospechosa de robo. Por favor, preséntese inmediatamente en la estación de policía” manifestó el oficial. Lucille no se sorprendió en absoluto con la noticia. Era tal y como ella había esperado. Respondió: "De acuerdo. Por favor, deme 20 minutos". Tras colgar el teléfono, bajó las escaleras. Dahlia estaba trabajando en la cocina. Al ver que Lucille estaba a punto de salir, le preguntó: "Señorita Jules, ¿adónde va? ¿Piensa almorzar en casa?" "Sí. Volveré pronto". Mientras hablaba, Lucille salió por la puerta. Luego pidió un taxi y se dirigió directamente a la estación de policía. Mientras tanto, en la estación de policía,