Capítulo 487

El corazón de Oliver dio un vuelco con la repentina petición de Diana. Ella nunca le hablaba en ese tono, y mucho menos le pedía ayuda. De hecho, sus acciones siempre dejaban claro que estaba trazando una clara línea entre ellos. Sin embargo, él se aferró a esa esperanza y se negó a abandonarla. Cuando escuchó a Diana hablar así, al principio pensó que se equivocaba. Después de confirmar que efectivamente era ella, se tranquilizó y puso el celular entre la oreja y el hombro, y se quitó los guantes que acababa de utilizar para atender a un paciente. "¿Qué necesitas?". Cuando Diana escuchó su respuesta, supo que las cosas irían bien. "Admito que soy una sinvergüenza. Estuve queriendo rechazarte, pero aún así... tuve que venir a pedirte ayuda", dijo Diana. Respiró hondo al terminar de hablar para mantener ocultas sus emociones más vulnerables. Durante toda la conversación, mantuvo una calma inquietante. Una calma inusual que hizo sospechar a Oliver que algo grande sucedió. De lo co