Capítulo 457
Cuando ya nadie maldiga a una persona ni piense en ella, habrá desaparecido realmente del mundo.
Ese sería el verdadero fin de la muerte.
Julian podía sentir el desprecio y la insatisfacción en las palabras de la señora Fulcher. Más que eso, había pesar, desgana y añoranza. Si su abuelo estuviera vivo...
Si lo estuviera, Julian no habría ido al campo a asistir a la actividad de la herencia cuando era niño. No habría conocido a Kayla. No se habría vinculado a ella porque le salvó la vida.
No se habría confundido con su verdadero amor, ni habría confundido a Diana con la sustituta de Kayla.
"Tienes razón", dijo Julian, haciendo señas mientras miraba a la menuda y enérgica anciana. "Deberíamos maldecirlo".
El rostro de la señora Fulcher se ensombreció y le dio una fuerte bofetada en la cabeza. "¡Mocoso! ¡Tu abuelo era mi marido! Yo puedo maldecirlo, pero tú no".
"Tch". Julian chasqueó la lengua y soltó una risita. Luego, como un niño malcriado, se apoyó en la anciana.
Parecía un
Haga clic para copiar el enlace
Descarga la aplicación Webfic para desbloquear contenido aún más emocionante
Encienda la cámara del teléfono para escanear directamente, o copie el enlace y ábralo en su navegador móvil
Encienda la cámara del teléfono para escanear directamente, o copie el enlace y ábralo en su navegador móvil