Capítulo 445

Nina tenía razón. Diana no podía dejar que la naturaleza siguiera su curso en este asunto, porque Kayla no recibió lo que se merecía. Y Julian... seguía interfiriendo en la vida de Diana como le daba la gana. Este no era el final que Diana quería. Pensando en eso, Diana se levantó de golpe y se ofreció a limpiar el sudor de la cara de Oliver. Él miró lo cerca que tenía su cara de la suya y el corazón le dio un vuelco. Instintivamente, sus ojos se abrieron de par en par y la miró de manera extraña, como preguntándose por qué lo hacía de repente con esa cara. "Lo siento", dijo Diana, retrocediendo ligeramente mientras susurraba, "sé que es despreciable por mi parte utilizarte de esta manera, pero ahora, no tengo otra opción porque Julian podría tener a alguien cerca para vigilarme. Quiero recordarle que no soy Kayla. Soy Diana, su exesposa, y espero que pueda dejar de entrometerse en mis asuntos". Oliver finalmente reaccionó y dijo, "¿Te está espiando?". "Supongo que sí", dijo D