Capítulo 1235

¡En serio! Aunque Sean y Betty poco a poco no querían recibir abrazos de ella, Diana estaba acostumbrada a hacerlo. Siempre estiraba el brazo instintivamente para abrazarlos cada vez que los gemelos se sentían mal. No podía evitar sentir que el dicho era cierto. No es el niño el que no soporta dejar a la madre, sino la madre la que no soporta dejar a su hijo. Aunque estuviera embarazada de gemelos, Sean y Betty seguían siendo niños que necesitaban el abrazo de una madre a sus ojos. Pero en realidad, ya habían crecido tan altos... Sean sintió que la decepción crecía en el pecho de Diana y casi contuvo lo que quería seguir diciendo. Toda la familia comenzó a salir del funeral y a dirigirse hacia el coche. Todos estaban reunidos; como no era hora de comer, el apetito de nadie se vería afectado. Sean pensó que no habría mejor momento que éste. Decidió hablar. "Papá, mamá". "¿Sí?". Diana no pudo evitar pellizcar las mejillas de su hijo. "¿Qué pasa? ¿Por qué tan serio?". Su corazó