Capítulo 39

Isabel abrió lentamente los ojos y en su mirada se percibía una frialdad evidente. —No estoy segura de si hay hechos ocultos detrás de esto, ni si las personas que me persiguen fueron enviadas por él. —Pero sí sé que él tiene que estar implicado. Juan guardó silencio por un momento y luego levantó la vista hacia Isabel. —Entonces, ¿quieres que intervenga con esta persona cuando encuentre la pista esta vez? Al oír esto, Leticia tomó una almohada que estaba a su lado y la arrojó hacia Juan. —¡Estás loco! ¡Ese es el padre biológico de Isabel! Un ruido sordo. Juan atrapó la almohada con una mano y sonrió siniestramente. —Si su padre podría ser quien quiere hacerle daño, entonces claro que debo actuar primero. —Deja de decir tonterías. Si realmente llegas a saber algo y actúas contra él, me preocuparía que acabes sin un cuerpo entero. Isabel miró a Juan con desdén. —De todos modos, ya hemos estado rastreando esto durante tanto tiempo, unos días más no harán daño. Solo asegúrate de que tus h