Capítulo 85
Grace la señaló y, por su actitud, se veía que la habría abofeteado de buena gana.
De modo que Stella se dio cuenta de que su abuela le habría propinado un buen coscorrón y enseguida la habría sermoneado, si no hubieran estado frente a otras personas.
No obstante, Grace suspiró para calmarse y se conformó con decirle: “¡Bueno, Stella, ve y lava las uvas!”
¿Qué más podía hacer?
Stella escuchó la orden de su abuela y rápidamente recogió la bolsa de uvas de la mesa para ir al baño.
Era evidente que quería evadirse de la situación.
Pero, aunque se dio prisa, enseguida tuvo la sensación de que un enorme tigre venía hacia ella.
Grace no quiso pedir a sus visitantes masculinos que fueran a lavar y servir las frutas, puesto que ellos ya se habían tomado la molestia de ir a comprarlas.
Y tampoco creía que supieran lavarlas bien, dada su condición de hombres de negocios.
Stella apenas había logrado dar unos pocos pasos con las frutas en sus manos.
Creyó que al fin tendría un momento de tranquil

Haga clic para copiar el enlace
Descarga la aplicación Webfic para desbloquear contenido aún más emocionante
Encienda la cámara del teléfono para escanear directamente, o copie el enlace y ábralo en su navegador móvil
Encienda la cámara del teléfono para escanear directamente, o copie el enlace y ábralo en su navegador móvil