Capítulo 54

Stella no podía entender la actitud de Rene como director general. Era impredecible; nadie podía adivinar sus pensamientos. ¡Para Stella él era aterrador! Estaba claro que ella solo había hablado por teléfono durante tres minutos, ¿entonces por qué, cuando él apareció, el ambiente se volvió horrible? Era como si ella hubiera cometido un gran crimen al hacer una llamada. ¡Era aterrador! "¡Señorita Richard, parece que no conoces las reglas de la compañía!", él dijo y se acercó paso a paso. Su ritmo no era rápido ni lento, por lo que nadie podría adivinar lo que estaba pensando. Esto asustaba a la gente, porque era como si el peligro se estuviera acercando. Stella no sabía qué había hecho mal y solo lo miró sin comprender. "¡En la empresa no puedes hacer algo que no esté relacionado con tu trabajo!". Sobre el escritorio de la secretaria general había un libro de reglas y regulaciones de la compañía. Rene pasó junto al escritorio, agarró el libro y lo puso en el asiento de Stella. ¡Bum! ¡