Capítulo 288
La unidad de cuidados intensivos estaba muy silenciosa, excepto por el susurro de los instrumentos. RK se inclinó sobre la cama de Stella, tomó su mano y colocó suavemente la palma sobre su rostro.
“¡Stella, despierta! ¡Despierta! ¿Me escuchas? Puedes insultarme o golpearme, haz lo que quieras conmigo. En cuanto despiertes, enviaré a Adrian de vuelta a tu lado, ¿te parece?”
Por fin, RK comprendía lo importante que era Adrian para ella. No exageraba cuando le decía que su hijo era su razón de vivir. Él, en cambio, se había comportado como un hombre mezquino, que no podía soportar la idea de que Tristan ocupara su lugar como esposo y padre. Ahora que acababa de reconocer su error, estaba dispuesto a soportar cualquier cosa, con tal de que ella despertara.
“¡Oh, cielos! ¿Por qué tuviste que atentar contra tu vida? Nunca imaginé que llegarías a ese extremo. Tienes temperamento y coraje, ¡lo sé! Y también sé que no te rindes fácilmente. ¡¿Cómo pudiste saltar?!”
“¡Stella, despierta, te lo su

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