Capítulo 233

Cuando estaba en la universidad, ese hombre no podía controlarla. ¡Era muy diferente a su situación actual! Recluida en la mansión, no solo la vigilaban todo el tiempo, sino que le era imposible ver a sus amigos. Aunque había un ejército de sirvientes dispuestos a atenderla, Stella sabía muy bien que se ocupaban de monitorear todos sus movimientos para informarle a su jefe. Tenía tan coartada su libertad personal, que casi podía decirse que el presidente la tenía secuestrada. En estos momentos, sus amigos estarían disfrutando del buen clima, para luego volver a sus estudios felizmente. Pero… ¡Ese no sería su caso! ¡Caray!, ¡era como la historia oscura! “Señorita Richard, ¿qué quiere comer? ¡Haré que alguien le prepare algo delicioso! ¿O tal vez prefiera un buen libro para leer?” La criada vio que Stella estaba aburrida, por lo que amablemente trató de ofrecerle algunas alternativas. Por último, dijo: “O… Si realmente se siente aburrida, también puedo contarle algunos chistes, ¿qué le