Capítulo 19

Después de mimar a Madelyn para que volviera a la habitación, Andrew y Rowan regresaron al estudio. Andrew dijo: “Vayan y averigüen qué le pasó últimamente”. Les había dicho a Rowan y a Jason que la vigilaran, pero su transformación había sido extremadamente suave y repentina. La forma en que se enfrentó a Easton cuando se encontró a solas con él esta noche había hecho que la confianza de Andrew en ella creciera aún más. Ya que no era una actuación, algo debía haberle sucedido para causar una transformación tan drástica. “De acuerdo”. Rowan también sentía curiosidad por saber por qué Madelyn había cambiado. Se preguntaba si no estaría actuando otra vez. Cuando Andrew regresó a la habitación, Madelyn había terminado de ducharse y le esperaba obedientemente en la cama. Ella siempre había insistido en dormir con él en habitaciones separadas y le sorprendió que se quedara despierta en su habitación. Andrew se quitó la ropa y se dirigió al baño. “Cariño, deja que te dé una ducha”. Madelyn saltó de la cama y corrió hacia él. Andrew se rio. “No, no es necesario”. “No, deja que lo haga yo. Tu herida no debe entrar en contacto con el agua”. Después de ducharse, ella tendría que cambiarle el vendaje de la herida. Andrew la abrazó y le dio un beso. “Si te llevo adentro, me temo que no podré ducharme bien”. “¿Qué quieres decir con eso?”. Nada más decirlo, Madelyn se dio cuenta de lo que Andrew le estaba insinuando y se sonrojó acaloradamente. Lo fulminó con la mirada. “¿Puedes detenerte por un momento?”. “¡Nunca pude hacerlo en el pasado y ahora me resulta aún más difícil!”. Madelyn se quedó sin palabras. ¡Bien! Aunque en su vida pasada le había tratado con frialdad y no había mostrado ningún interés por él, nunca había dejado de intentarlo. Ahora, nunca dejaría escapar una oportunidad. “¡Puedes entrar tú mismo, entonces!”. Madelyn se dio la vuelta y saltó rápidamente de nuevo a la cama, pareciendo un ágil conejo. Andrew sonrió con cariño mientras la observaba. ¿Acaso Madelyn creía que podía evitarle tan fácilmente? Cuando llegó la hora de que Andrew se cambiara de ropa, dominó a Madelyn agresivamente y le hizo imposible escapar de él. Finalmente, se acostó en la cama de forma agotada y cayó en un profundo sueño de inmediato. Cuando se despertó al día siguiente, Madelyn se levantó con furia. ¡Él había estado tan ansioso la noche anterior que se había olvidado por completo de cambiarle el vendaje! “No tienes permitido volver a tocarme en el futuro”. Al oír eso, Andrew sonrió. Madelyn estaba furiosa. Se apresuró a coger el botiquín para cambiarle el vendaje de la herida. Se había formado una costra y vio que se estaba recuperando bastante bien. Sin embargo, seguía preocupada, así que llamó a Ivan para que viniera a echarle un vistazo. Mientras estaban en la mesa de desayuno, Rowan entró para hacer otro informe sobre el trabajo. Madelyn le dirigió una mirada de ligera irritación. Nunca había pensado mucho en ello en el pasado, pero ahora, sentía que Rowan estaba oprimiendo a Andrew. “Señor Miller, algo ha ocurrido”. Rowan miró furtivamente a Madelyn antes de entregarle su tableta a Andrew. Madelyn frunció el ceño. ¿Qué había querido decir Rowan con aquella mirada? ¿Acaso el informe de trabajo tenía algo que ver con ella? Un ruido resonó mientras Andrew golpeaba la tableta contra la mesa del comedor. El corazón de Madelyn dio un vuelco del susto. Se preguntaba si habría ocurrido algo malo. Extendió su mano y cogió la tableta para mirarla. El titular llamativo decía: [¡La Esposa de Andrew Miller y su Inmoral Cita Nocturna con Easton Miller!]. La foto que lo acompañaba era la de Easton abrazándola anoche. ¿Qué hay de las fotos de ella abofeteando a Easton y dándole patadas? ¿Por qué no se habían publicado? ¿Acaso el periodista estaba ciego? Madelyn se sobresaltó de inmediato. Arrojó la tableta con fuerza sobre la mesa con un sonoro golpe. “Easton está haciendo esto para inculparme”. Andrew y Rowan se quedaron en silencio. “Cariño, tienes que creerme. Este informe está sacando las cosas de contexto. Debe de haber contratado a alguien para tomar estas fotos en secreto”. Madelyn estaba agitada y no conseguía calmarse en absoluto. Andrew lucía furioso y había una mirada gélida en sus ojos. Cuando Madelyn vio que no estaba diciendo nada, se puso ansiosa de inmediato. Se acercó a él y le agarró el brazo rígido. “Cariño...”. Madelyn miró a Andrew con preocupación. Se había esforzado mucho por recuperarlo. ¿Ese idiota de Easton de verdad iba a arruinarlo todo? Lo más importante para ella ahora mismo era la confianza de Andrew. Rowan miró a Madelyn y le dijo: “Este incidente podría causar algunos problemas, así que, por favor, no salgas de casa durante los próximos dos días”. Madelyn le lanzó de inmediato una mirada gélida. Rowan se quedó en silencio. ¿Acaso no estaba simplemente exponiendo los hechos? Madelyn miró a Andrew de forma nerviosa, sobre todo cuando vio la vena palpitante en su frente. “Cariño, por favor, di algo”. Él tenía que creerla. Cuando Andrew vio lo nerviosa que estaba Madelyn, se sintió ligeramente apaciguado. Extendió su mano para alborotar su sedoso cabello. “No es que no confíe en ti...”. “No te enojes, entonces. No te preocupes, me aseguraré de explicártelo”, dijo Madelyn tan seriamente como si estuviera haciendo un juramento. Andrew vio cuánto intentaba explicarse. En el pasado, nunca se habría explicado y, en su lugar, habría causado un escándalo. Su mirada se suavizó al ver lo nerviosa que estaba por su culpa. “De acuerdo, esperaré a oír tu explicación”. “Está bien, está bien. Me aseguraré de explicarlo bien”. Madelyn soltó un suspiro de alivio cuando vio que Andrew había cedido. Ella ya estaba tramando cómo lidiar con Easton y Elena. Se enfureció aún más cuando pensó en los Garcia. No había que ser un genio para saber que el pequeño favor que había logrado ganarse ahora había sido completamente arruinado por Easton. Andrew asintió y miró detrás de ella. “Ve y ocúpate de ello”. “De acuerdo. ¿Qué hay del Señor Easton?”. Al mencionar a Easton, hubo un brillo gélido en los ojos de Andrew. Se volteó para mirar suavemente a Madelyn. “¿Cómo quieres lidiar con él, Maddie?”. Madelyn se quedó en silencio. ¿Aún no confiaba plenamente en ella? ¿La estaba poniendo a prueba? Al menos no la había abandonado ni había salido corriendo, lo cual ya era un gran alivio. Tomó un profundo respiro. “Yo misma me encargaré de ese idiota”. Easton quería utilizar a la opinión pública para unirlos y obligar a Andrew a divorciarse de ella, ¿verdad? ¡Ella le haría desear estar muerto! “Cariño, tienes que tener cuidado con él”, le recordó Madelyn a Andrew después de pensarlo por un momento. En su vida pasada, Easton había utilizado medios despiadados para hacer que Andrew se enojara tanto que perdiera la racionalidad. Aunque la trayectoria de los acontecimientos había cambiado ligeramente, seguía utilizando los mismos métodos para provocar la ira de Andrew. “La Abuela Athena tiene algo que él quiere”, añadió Madelyn cuando Andrew no dijo nada. Andrew se sobresaltó. Aunque no había esperado que Easton fuera tan astuto, aun así asintió a lo que dijo Madelyn. “De acuerdo”. Después del desayuno, Andrew tuvo que ir a trabajar. Esta vez, Madelyn no fue con él. En su lugar, se quedó en casa e hizo una llamada telefónica. Al cabo de una hora, un deslumbrante Aston Martin se detuvo frente a la Villa Serenidad y una mujer vestida con zapatos de tacón negros y traje corporativo bajó del coche. La luz del sol la iluminaba, resaltando su belleza. Solo por su aspecto, parecía severa y capaz. “Carrie, por fin estás aquí”. Madelyn corrió hacia ella y estaba a punto de lanzarse a los brazos de Carrie cuando ésta la esquivó, luciendo desdeñosa. “¿Qué está pasando? ¿Por fin estás pensando con claridad?”.