Capítulo 44
Charlie saltó de la silla y preguntó: "¿Realmente eres nuestra abuela?".
"¿Por qué mamá no está aquí?".
"¿Dónde está mamá?".
Cheyenne vio a esos tres niños adorables y al instante les tomó cariño, sobre todo cuando vio a la niña, que era exactamente igual que Anne en su infancia.
Los niños no se parecían a Anne. Debían parecerse a su padre...
Cheyenne tomó las manitas gorditas de los niños y les dijo: "Mamá los espera en casa. Podrán verla cuando regresemos a casa".
Anne esperaba ansiosa en casa; no podía estar de pie ni sentada por la agitación.
¡Le era realmente difícil imaginar que los tres niños volaran solos a Luton y que ninguno de los adultos se diera cuenta que algo estaba mal!
¡Solo tenían dos años!
Se oyó un ruido de una puerta abriéndose. Tras empujar la puerta, los tres niños se apresuraron a entrar. Cuando vieron a Anne, se lanzaron hacia ella con entusiasmo...
"¡Mamá!".
"¡Mamá!".
"¡Mamá!".
Anne se acercó y abrazó con fuerza sus suaves cuerpecitos
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