Capítulo 256

Fuera, los fuegos artificiales brillaban en el cielo nocturno, y Patricia escuchó el sonido. Ignacio le había enviado un mensaje por Facebook: [Me encantaría ver los fuegos contigo.] Adjuntó algunas fotos de los fuegos que había tomado desde su casa. Patricia se limpió las lágrimas, pero no podía ver con claridad. ... Casa Medina. Ignacio no tenía ganas de comer; estaba recostado en el sofá, abrazando su teléfono móvil. La señora Yolanda lo llamó varias veces, pero él no respondió. Al verlo con el teléfono, ella entendió lo que pasaba y le dijo: —¿Por qué no llamas a Patricia para que venga? —Ella fue a casa de una amiga para celebrar. —¿A casa de su amiga? ¿No va a volver a casa? Ignacio respondió: —Su papá es un mal hombre. La última vez que fue, él la manipuló, casi pasa algo malo. La señora Yolanda, al escuchar esto, se preocupó un poco y le dijo: —¿Y por qué no la traes a casa? —¿Ustedes lo aceptan?— Ignacio, al escucharla, se sentó rápidamente. La señora Yoland