Capítulo 96
Pedro tragó saliva, —¿Por qué él admitiría que tuvieron un romance?
Leticia respondió: —Fue un malentendido suyo; pensó que tú tenías intenciones hacia mí y que yo no correspondía tus sentimientos. Usé su nombre como excusa para rechazarte, y Oscar, creyendo eso, lo admitió sin saber que era una trampa que tú habías tendido.
Pedro se quedó sin palabras, enfrentándose a su primer gran malentendido en la vida.
Finalmente, se resolvió el malentendido.
En el corazón de Pedro, las nubes se despejaron, revelando un cielo soleado.
Leticia, igualmente sorprendida por la revelación de que todo había sido un malentendido, comenzó a golpear a Pedro, frustrada: —¡Por eso tienes que hablar las cosas conmigo en vez de hacer suposiciones, mírate, cuánto me has enfadado!
Pedro, aún recuperándose de los golpes de su esposa, sin replicar, se dirigió a su escritorio, tomó el teléfono y llamó al director de la escuela, diciendo: —Hola, soy Pedro.
El rector respondió con respeto. —Hola, Sr. Jiang, ¿en qué
Haga clic para copiar el enlace
Descarga la aplicación Webfic para desbloquear contenido aún más emocionante
Encienda la cámara del teléfono para escanear directamente, o copie el enlace y ábralo en su navegador móvil
Encienda la cámara del teléfono para escanear directamente, o copie el enlace y ábralo en su navegador móvil