Capítulo 80

La familia Jones. La mirada de Cameron era fría mientras pensaba en el pasado. Su teléfono sonó, interrumpiendo sus pensamientos profundos. Miró la pantalla. Era un número que no reconocía. Cameron colgó el teléfono inmediatamente, pensando que era una llamada fraudulenta. Sin embargo, el teléfono volvió a sonar rápidamente. Cameron frunció el ceño mientras respondía la llamada. “Hola, ¿puedo preguntar quién llama?”, preguntó Cameron. Solo hubo silencio al otro lado de la llamada. “¿Marcaste el número equivocado?”. Cameron estaba a punto de colgar. “Cameron, de veras es tu voz”, dijo la persona al otro lado de la línea. Era la voz de una mujer. Su voz era etérea. Dentro de esa cualidad etérea, había una frialdad natural en su tono, como un manantial helado y secreto, muy reconocible. Pero al escuchar esta voz, la mirada de Cameron instantáneamente se volvió fría. Era ella. Era Laura. “Han pasado siete años. ¿Te encuentras bien?”. La mujer volvió a hablar. “Estoy muy bien”