A Catherine le dolía tanto el brazo que las lágrimas comenzaron a rodar por sus mejillas. Creyó que estaba cara a cara con un demonio.
Lo lamentó profundamente y se sintió muy culpable por eso.
"¡Qué maldad la tuya! Confiaba tanto en ti...".
La ira estalló en el pecho de Shaun. ¿Por qué esta mujer podía hacer algo así? ¡Lo que más odiaba en su vida era ser engañado!
Estaba resentido con ella, pero la piel que estaba tocando pronto le hizo perder la cabeza. Estaba perdiendo el control, y la arrojó sobre la cama brutalmente.
La ropa de Catherine se rompió. Shaun se levantó como un loco y corrió al baño para ducharse de nuevo con agua fría.
¡Bam!
Se oyó el portazo de la puerta. Catherine sintió como si también hubiera roto su corazón.
Catherine se estremeció sin querer y miró al techo sin comprender la reacción tan exagerada de Shaun. Se preguntó si él estaba tan resentido con ella que se negaba a tocarla jamás en el futuro.
Era posible. Él nunca se había enamorado de ella.
Hab