“Inicia una investigación. Investiga a fondo”.
Chester ordenó con indiferencia.
Eliza le había dado una profunda lección. Él ya no se atrevía a subestimar a nadie.
Tal vez había un agujero que había pasado desapercibido en el fondo de su nave. Del cual él no se enteraría si no prestaba más atención.
“Está bien”. Ken se dio la vuelta y estaba a punto de irse.
“Espera”, lo llamo Chester. “¿Cómo está la situación del lado de Eliza?”.
Ken estaba desconcertado. Dijo apresuradamente, “Ella donó los mil millones de dólares que le diste a áreas afectadas por la pobreza. Recibió muchos comentarios buenos en internet. Su popularidad y la cantidad de fanáticos han superado a los actores y actrices de primera. Muchas juntas de turismo de todo el país la buscan para que sea su embajadora, pero ella los rechaza a todos. Anunció que nunca volverá a ingresar a la industria del entretenimiento”.
“¿Qué diablos quiere hacer ella?”. Chester se sentó en la silla de cuero. Él había dejado de trata