“¿Te refieres al incidente de ayer?”. Ryan metió las manos en los bolsillos con una expresión seria. “Me preocupaba que mi mamá me regañara porque ayer me pidió que fuera a socializar con algunos invitados internacionales. Tenía que encontrar una buena excusa. Fue genial inventar la excusa de que querías beber porque estabas triste. Después de todo, es un problema si una mujer se emborracha afuera”.
“Resulta que ayer tenías algo importante que hacer”. Freya comenzó a sentirse culpable. “No vuelvas a hacer eso la próxima vez. Después de todo, socializar es importante…”.
“Olvídalo. Es más relajante hablar contigo que con esos invitados internacionales”. Ryan le acarició la cabeza. “No pienses demasiado en las cosas. Deberías empezar a escribirle a las pocas personas que mi mamá te presentará. Habiendo dicho eso, no los contactes de la nada. Primero dime quien te causó una buena impresión y te ayudaré a juzgar su carácter. Esos hombres ricos son buenos ocultando sus trucos. Solo por su