Capítulo 116 Volver a sacar viejos asuntos
Después de aquellas palabras, Noelia captó en el fondo de los ojos de Honorato un brillo de sarcasmo y agitación que no podía ocultar.
Ella preguntó con calma: —Has hablado tanto tiempo, ¿tienes alguna prueba concreta de que fue Antonio quien lo hizo?
Honorato, con un dejo de orgullo, soltó una risa burlona: —Por supuesto, tengo testigos.
—¿Quién?
...
Honorato hizo una pausa, y al ver que Noelia insistía sin rendirse, desvió la conversación con una mirada esquiva: —Si quieres saber la verdad, llama a Antonio. Si hablamos juntos de los viejos rencores, ¿no sería más claro?
Al ver su intención de ocultar a alguien, Noelia tuvo un pensamiento repentino; en la superficie, se quedó paralizada y asintió rígidamente.
—Tienes razón —dijo con voz sorda y enfadada—:¿Por qué no lo llamas tú directamente?
Al mencionar esto, Honorato se mostró aún más enojado y exclamó: —¡Quién sabe dónde está!
Quería atrapar a Antonio, pero este, astuto hasta los huesos, aún no había dado señales de

Haga clic para copiar el enlace
Descarga la aplicación Webfic para desbloquear contenido aún más emocionante
Encienda la cámara del teléfono para escanear directamente, o copie el enlace y ábralo en su navegador móvil
Encienda la cámara del teléfono para escanear directamente, o copie el enlace y ábralo en su navegador móvil