'¿Quién es? ¿Quién dijo eso?'. La voz era tan dulce pero tan triste que ella quiso derramar lágrimas.
"Te protegeré para siempre. No dejaré que sufras la más mínima injusticia ni que nadie te haga más daño".
'Esa es... la voz de Jin... Es lo que Jin me dijo una vez'.
Ling Yiran se puso en cuclillas en el suelo y sintió que todo lo que podía escuchar eran las palabras que Yi Jinli le había dicho una vez.
‘No pienses en esas palabras. No pienses en ellas…’, ella se repetía mentalmente.
Luego... Pareció oir pasos. El repiqueteo de pasos sonaba tan claro.
‘¿De quién son estos pasos?’.
Un par de zapatos de cuero negro le llamaron la atención.
Ella lentamente levantó la cabeza y vio el rostro familiar.
‘Es la cara de Jin... Como la que vi en Días borrachos’.
'¿Es porque estoy borracha? ¿Es por eso que escucho voces y también estoy alucinando?'.
Ling Yiran se puso de pie tambaleándose, medio llorando y medio riendo de la figura frente a ella mientras decía: "No... me muestres tu ro