Habían pasado cinco años desde entonces. Jiang Sese pensó que podía permanecer tranquila y serena cuando los volviese a ver.
La verdad era que el odio que había reprimido por dios sabe cuánto tiempo estaba surgiendo y causando estragos en su mente.
Sus recuerdos destellaron frente a ella como la repetición de una película vieja. En sus oídos estaba la risa estridente de Jiang Nuannuan: "Yo fui quien le quitó la máscara de oxígeno a tu madre.”
"¡Jiang Sese, quiero arruinarte!"
"Papá es mío; la fortuna de la familia Jiang es mía; el Hermano Sichen es mío. Eres solo una niña abandonada por nuestra familia..."
Cada palabra aún ardía vívidamente en su mente.
No queriendo tener nada que ver con ellos, se regresó y entró a la sala de descanso.
La aguda Jiang Nuannuan se distrajo cuando vio una figura familiar. Ella dejó escapar, "Esa fue ..."
"¿Hmm? ¿Qué pasa?" Lan Sichen estaba hablando con Li Sheng cuando la escuchó hablar. No pudo evitar girar la cabeza para interrogarla.
Jiang Nu