Capítulo 143 Sería demasiado tarde

Deirdre Mckinnon eventualmente estuvo a punto de terminar con su miserable vida de la manera más vergonzosa y ridícula posible. Ella se cayó y estaba al alcance del perro. Sintió que el perro salvaje estaba abriendo la boca por el odioso hedor antes de desmayarse. En medio de su fiebre, Deirdre parecía estar en un sueño. Soñó con un cachorro moviendo la cola, acercándose ansiosamente a ella. Debería ser Bliss porque seguía lamiendo su rostro. Mientras tanto, su temperatura corporal bajó. Finalmente, la lluvia se detuvo. Brendan estaba en un balcón. El humo de un cigarrillo que apagó permaneció debajo de él. Al levantar la cabeza, miró hacia el cielo brumoso. Faltaba otra hora para el amanecer. Abajo... Sam, vestido con un abrigo, entró a la mansión por la puerta. Mientras se sacudía el agua de lluvia, vio a sus colegas en el sofá. Se sobresaltó por un momento y se sintió algo preocupado. “¿Qué los ha mantenido a todos aquí hoy?”. Sam no recibió ninguna respuesta directa y solo u