Capítulo 48
Resultado: perdió la cara.
—Nunca has cocinado, así que es normal que no te salga bien —dijo Héctor.
Isabel hizo un puchero y se quejó: —Cocinar parece algo fácil de ver, pero en realidad es muy complicado. La forma de controlar el fuego, el orden y la cantidad de los condimentos, todo tiene su ciencia.
—¿De verdad? —Héctor nunca se había puesto a pensar en ello. Siempre había creído que las mujeres nacían sabiendo cocinar.
Cuando Leticia se casó con él, sabía cocinar muy bien y sus platillos eran deliciosos.
Aunque, pensándolo bien, tenía sentido. Leticia e Isabel no provenían de la misma clase social.
Isabel había nacido en una familia adinerada, como la menor de los hijos, criada con muchos cuidados y siempre recibiendo todo de manera fácil, con la comida y todo lo demás servido. ¿Cómo iba a saber cocinar?
Pero Leticia era diferente, su familia le había inculcado una gran habilidad para las tareas domésticas.
—Dime, si algún día estamos juntos y yo no sé cocinar, ¿te molestaría? —pr
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