Capítulo 61

El corazón de Lucía murió en su momento de mayor pasión hacia Wálter. La noticia del divorcio llegó tan repentinamente que, en un instante, su corazón se volvió cenizas. Pero sus sentimientos hacia Wálter no eran algo que pudiera abandonar en un momento. Con las lecciones aprendidas, solo podía asegurarse de que no habría una próxima vez para tales incidentes. —¿A quién subestimas?, ya he cambiado tantos novios. Hablando de relaciones, Yolanda se sentía un poco culpable. Ella siempre había envidiado la luz estelar en los ojos de Lucía cuando mencionaba a Wálter. También quería encontrar a alguien que la hiciera sentir así. Encontró a dos hombres, pero por algunas razones se separaron. Después de cada ruptura, se sentía más feliz que triste. Lo que sentía por esos hombres era más gusto que amor. Lucía, abrazando sus rodillas, se sentó en el sofá, incapaz de despegarse del mal estado de ánimo causado por las mentiras de Wálter. Yolanda no podía seguir culpándola. —P