Angeline le confesó de repente diciendo: “Me gustas”.
La expresión de Jay estaba llena de rechazo. “No me interesa”.
La boca de Angeline se abrió un poco... La sensación de fracaso la golpeaba como nunca antes.
“¿No lo pensarás un poco?”.
Jay la miró como si le estuviera diciendo en silencio: ‘¿Por qué perder el tiempo en algo como esto?’.
Angeline hizo un puchero, pero aún así persistió y comenzó a presumir. “Soy una buena persona, sabes. Soy estudiosa, rica y sé consentir a alguien. Hay innumerables hombres en Capital Imperial a los que les gusto”.
¡Las comisuras de la boca de Jay se torcieron con fuerza!
“¿Estás segura de que esos hombres no te persiguen solo por tu dinero?”.
Angeline respondió: “Imposible. Soy la mujer más atractiva en toda la Capital Imperial”.
Jay miró el nuevo ‘Libro Definitivo de Personajes Famosos’ que acababa de comprar y que estaba en la mesa de estudio con los labios torcidos. “Eso es porque eres el alfa número uno en la lista”.
Angeline: “...”.