Capítulo 169

Con un sonoro golpe, Wilbur aterrizó con las piernas arqueadas, creando un cráter de varios metros de profundidad en el suelo. Miró hacia delante y encendió un cigarrillo mientras permanecía allí de pie. Unos minutos más tarde, Elsa aterrizó junto a Wilbur. El helicóptero no tenía donde aterrizar, así que el piloto no tuvo más remedio que regresar. Elsa contempló a Wilbur dando caladas a su cigarrillo y el cráter que le rodeaba, y soltó un resoplido. "Eres increíble, amigo". "Estoy bien". Dijo Wilbur con calma. Elsa se encogió de hombros, sin saber qué responder. "¿Crees que el monstruo podría haber huido a otra parte?". Preguntó Elsa preocupada. Wilbur respondió: "Está aquí mismo". Justo entonces, la figura de alguien que corría alocadamente apareció ante su vista. Wilbur frunció el ceño. Elsa se sorprendió al comprobar que la herida del monstruo se había curado de algún modo. El agujero sangriento de la cintura había desaparecido, al igual que el del pecho. El