Capítulo 69

—¿El presidente Bruno ha tomado demasiado? —preguntó Raquel, sorprendida. —Pero, ¿no deberías llamar al señor Víctor? —Víctor también ha tomado bastante, están juntos —mintió descaradamente Mario, con total convicción. —Si no vienes, no me quedará otra opción que dejarlos en la calle a dormir. Tras decir esto, colgó el teléfono. Mario miró su móvil y sonrió para sí mismo. Bruno, estoy ansioso por ver si realmente te interesa esta tímida Raquel. Por su parte, Raquel, aún sosteniendo el móvil, permaneció pensativa durante unos segundos, imaginando a Bruno, borracho, siendo expulsado de la Luna Taberna y durmiendo en la calle con una expresión miserable. Si los medios captaran esa imagen, ¿no sería una enorme vergüenza para el Grupo Guzmán? Recordando que Bruno había bebido un poco ese día y le había pedido que lo llevara de regreso en calidad de su chofer, Raquel sintió que era esencial ir allí como su asistente. Tomó un taxi directamente hacia la Luna Taberna y, justo al llegar a la ent