Capítulo 61

Bajé la cabeza y comí por un rato, cuando de repente recordé que Víctor realmente no me conoce, ni sabe de mis gustos y prohibiciones al comer. Me sentí desolada y de repente exclamé: —¿Entonces, qué significaron esos cinco años que estuve casada con Víctor? Manuel tomó un sorbo de champán y, con lentitud, comentó: —Fue como desperdiciarlos con un perro. Me quedé sin palabras. ... Al día siguiente, me levanté temprano, encendí mi teléfono y encontré decenas de mensajes, la mayoría de compradores en una aplicación preguntando por precios. Respondí a algunos interesados. En cuanto a estos artículos de lujo de segunda mano, algunos mostraron confianza, mientras que otros expresaron sus dudas. No tengo mucho recuerdo de estos años en Internet, solo recuerdo cuando WhatsApp acababa de lanzarse. Responder cada mensaje fue muy difícil para mí, y en un abrir y cerrar de ojos, ya era mediodía. No fue hasta entonces que sentí un mareo de hambre, así que rápidamente fui a la cocina a buscar algo