Capítulo 345

No es que no me gusten los lirios, es que no me gusta este tipo de lirios. Anita dio una vuelta alrededor de las flores. —No veo ninguna tarjeta. Tampoco parece que sean de parte del presidente Manuel. Sarita, ¿tienes algún otro pretendiente? Yo le respondí: —¿Crees que tengo? En ese momento, sonó mi celular. Era una llamada desconocida. Fruncí el ceño, no quería contestar. Mi intuición me decía que no quería ver a la persona que estaba llamando. Anita tomó el celular por mí. Apenas dijo "hola" y su expresión cambió. Tomó el celular y salió apresuradamente; luego escuché que comenzó a gritar en el pasillo. —Víctor, ¿estás loco? ¿Por qué molestas a Sarita?... ¿Qué? ¿Que me entrometo demasiado? Ojalá me hubiera entrometido más antes para impedir que Sarita te quisiera... —Estás loco, toda tu familia está loca... Eres un codicioso. Aún quieres tener tantos amantes al mismo tiempo, recibirás tu castigo... ... Yo estaba sin palabras. Cinco minutos después, Anita entró furiosa. Me lanzó el c