Capítulo 180

La enfermedad de Teresa se había prolongado hasta ahora principalmente por dos razones: primero, no había encontrado un médico tradicional con habilidades como las suyas. y segundo, Teresa no tenía el valor de ir a un hospital grande para hacerse un chequeo adecuado. En realidad, el tratamiento no era tan complicado, solo que el proceso era algo incómodo. —No, no quise decir eso... Quizás era porque le había venido la menstruación y se consideraba a sí misma como una verdadera mujer, pero la voz siempre arrogante y altanera de Teresa se volvió mucho más suave. —Entonces, ¿vas a cumplir tu promesa y entregar el hongo de sangre milenario? Alberto la interrumpió de nuevo. No le importaba si Teresa tenía o no la menstruación, estaba más interesado en el hongo de sangre milenario, porque este hongo equivalía a la vida de su sobrino Daniel. —Eh, de hecho quería hablar contigo sobre este asunto. Teresa de repente comenzó a titubear. Alberto frunció el ceño y su voz se volvió fría,—¿Quieres r